Viendo los premios de los concursos (he llegado a ver 30.000€ por un premio de novela, por ejemplo), y pensando en cómo es vivir de la escritura, es cuando me doy cuenta de que todos los escritores profesionales, incluso los que publican y son famosos, se presentan a esos concursos porque tienen que vivir de algo. Y entonces se convierte en la lucha de la jungla, en la ley del más fuerte y del más rápido, no hay compasión, ni sutileza, ni arte. Es, simplemente, el ansia por presentarse a todos los concursos para ganar dinero, ganar dinero para sobrevivir, para pagar las facturas, la hipoteca y poder subsistir.
Uf, todo eso mata todo el espíritu del arte. Pero la realidad es que, joder, hace falta mucho dinero para vivir, y, además, dinero recibido de forma continua.
2 comentarios:
Creeme que esto es extensible a toda forma de arte hoy en día. Aunque muchos artistas cobraron y vivieron de su obra en su momento (Miguel Angel sin ir más lejos) hoy en día hacer dinero con el arte es su único objetivo, lo que se traduce en un miedo terrible por parte de los que pagan la factura a innovar y arriesgar. Basta con echarle un vistazo al cine y comprobar cuáles son las producciones que más inversión reciben.
Se presentará Stephen King a estos concursos? :?
El problema es que alguien que decide "vivir del arte" en algún momento tendrá que "prostituirse" porque, quiera o no, hay que pagar facturas. Y salvo que uno se coma sus libros/esculturas/cuadros... pues es lo que hay, ¿no?
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