El viernes fui a ver la última película de
Woody Allen: Cassandra's Dream.
Había leído que seguía la línea de
Match Point (para mí, una de las obras maestras de Woody Allen), pero que no llegaba a su altura y que incluso se quedaba a medio camino, a pesar de que la idea era buena.
Bien, mi conclusión personal tras ver la película es que Cassandra's Dream es otra de sus
obras maestras.
De nuevo, la película juega con el tema de verse en la situación de asesinar para salir adelante, como ya ocurrió en
Delitos y Faltas o en Match Point.
En Match Point, el protagonista es un tipo ambicioso, frío y sin ningún escrúpulo, al cual (irónicamente) la suerte favorece. Y eso era lo que hacía que uno saliese revuelto emocionalmente al ver la película. Qué frialdad, qué suerte, qué hijo de puta.
En Cassandra's Dream, los protagonistas son personas normales, abocadas a cometer un crimen, pero aquí ni hay suerte, ni hay frialdad. Los remordimientos (antes y después del asesinato) son los que nos revuelven las emociones. Y de qué manera: la ansiedad que generan los preparativos del asesinato, las dudas, las conversaciones, y, después, las pesadillas, los remordimientos, de nuevo las convesaciones, nos mantienen tensos en el asiento, sufriendo como idiotas.
Y ése es el gran logro de la película, conseguir meternos en el horror de lo que van a cometer, y, cuando finalmente lo hacen, sufrir por lo que han cometido.
Hay una frase clave de un diálogo (de entre otras muchas que, como siempre con Woody Allen, son brillantes): "Antes era antes. Ahora es ahora. Y siempre va a ser ahora". Dicho mientras queman las armas con las que han cometido el asesinato.
Hay diferencias clave con Match Point, que desde mi punto de vista están bien elegidas porque había que eliminar la idea de que esta película es una copia de aquélla:
-El tono de la narración visual. No hay poesía en la imagen, no hay música clásica acompañando los movimientos de los personajes o de la pelota de tenis sobre la red. La narración es realista, rápida e inmisericorde.
-No hay un protagonista, sino dos protagonistas que son uno solo desdoblados en dos hermanos con conceptos morales totalmente opuestos, que actúan como ambición y remordimiento, interactuando y llevándolos a la destrucción.
Hay similitudes:
-La vida es así, se cometen actos nocivos y quizás, si alguien se da cuenta, te castiguen, pero quizás no, y todo seguirá igual, porque la vida no se rige por un sentido dramático coherente como las películas.
-La muerte llega y no hay tensión ni drama en ese momento, simplemente ocurre y deja frialdad y abandono.
Al que no le guste el Woody Allen serio, que no vea
Cassandra's Dream (ni
Match Point). Al que le guste su pensamiento trascendente y, a la vez, irónico, que vea estas dos obras maestras.
Las fechas: del jueves 29 de noviembre al domingo 2 de diciembre, en el Recinto Ferial de la Casa de Campo.
